El folclore canario tiene clarísimas influencias peninsulares (españolas y portuguesas), pero ha bebido también en las fuentes de América del Sur, continente con el que tantos lazos unen al archipiélago, para terminar con los ritmos autóctonos. Donde más claramente se adivina este recuerdo colectivo prehispánico es en ciertos aires de las islas como El Hierro y La Gomera. De todo ello, surge una música popular con clarísima personalidad, aunque sepamos que la Isa se derive de la Jota o que una de las coplas más sentidas por los isleños se llame, precisamente, Malagueña, nombre que revela meridianamente su origen. La Folía, cadenciosa y sensible, y el Tajaraste, alegre y sincopado, son los cuatro aires más característicos de este folclore, al que habría que añadir otros muchos para comprender su riqueza.
En la actualidad el municipio de San Miguel de Abona cuenta con varias agrupaciones tales como Parranda Aldea Blanca, Chaveña, Guargazal, Amanecer Guanche y Los Volcanes, dedicadas todas al rescate de nuestro folclore. Desde sus comienzos han venido ofreciendo un repertorio folclórico que se ha enriquecido con el paso del tiempo, tanto en calidad como en estilo. El principal objetivo de cada una de estas agrupaciones es preservar las tradiciones populares, por ello, cada año, participan en los diferentes actos folclóricos que se desarrollan en nuestro municipio como es el caso de el Día de Canarias, Festival Folclórico por las Fiestas Patronales, Romería, Baile de Magos o los varios festivales que cada uno de nuestros barrios organiza en época de fiestas.
En el municipio sanmiguelero cabe destacar la figura de D. Gabriel Rancel Díaz, artesano timplista que mediante el trabajo directo con maderas de palosanto, pino abeto, cedro y madera de aguacatero es capaz de elaborar el maravilloso instrumentos al que posteriormente arrancarán las más bellas melodías.
